La creatividad en los procesos y en los sistemas de Gestión
El 22 de octubre se celebra, en Colombia, el día del trabajador social, las personas, una profesión que busca favorecer el desarrollo de vínculos humanos saludables y fomentar cambios sociales que deriven en un mayor bienestar para las personas. Su participación en los procesos y Sistemas de Gestión de las organizaciones, permiten que las interacciones de los colaboradores y su entorno fluyan mejor y beneficie a los objetivos personales recordando permanentemente el lado humano de los procesos.
Un sistema de gestión es producto del esfuerzo de un grupo de colaboradores comprometidos con la perdurabilidad de la empresa. De allí que la creatividad juega un papel muy importante, ya que ésta no es sólo el proceso de generación de ideas sino, también, la gestión de las mismas para que se traduzcan en innovaciones que aporten valor a la organización.
A la hora de hacer frente a las situaciones estratégicas, presentes y futuras que forman parte de la vida empresarial, la creatividad adquiere una alta relevancia y depende de distintas variables de influencia. Una persona que tiene cualidades creativas, usando algunas técnicas específicas puede llegar a ser un baluarte significativo para hacer aportes de trascendencia a la organización.
Desde nuestra gestión, siempre buscamos que se usen todos los hemisferios del cerebro, pues cada uno brinda opciones invaluables para los procesos y sistemas de gestión:
El hemisferio derecho, es el lado creativo, donde se ubican la percepción u orientación espacial, la conducta emocional, facultad para controlar los aspectos no verbales de la comunicación, intuición, reconocimiento y recuerdo de caras, voces y melodías. El cerebro derecho piensa y recuerda en imágenes.
El hemisferio izquierdo está relacionado con la parte verbal, capacidad de análisis, capacidad de hacer razonamientos lógicos, abstracciones, resolver problemas numéricos, aprender información teórica, hacer deducciones, entre otras.
Sobre el curso del último trimestre del año, es momento de pensar en el cierre de 2020 y proyectar un 2021 que rompe con las tendencias que, históricamente, hemos vivido. 2020 es un año muy particular que nos han enseñado a ser más creativos, flexibles y menos rígidos. Aunque nos guste tener todo bajo control y siguiendo los pasos estipulados.
Es momento de la inspiración estratégica que permitirá la perdurabilidad y trascendencia de nuestras organizaciones. De pensar en pro de los equipos que conformamos, de lo que deseamos construir y de lo que en verdad es importante para cada uno de nosotros.