LOS SISTEMAS DE GESTIÓN Y LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
“Un sistema de gestión es una herramienta que permite controlar, planificar, organizar y automatizar las tareas administrativas de una organización. Un sistema de gestión analiza los rendimientos y los riesgos de una empresa, con el fin de otorgar un ambiente laboral más eficiente y sostenible (…) Es importante que cada área tenga claro y definido tanto su objetivo como sus metas.”
(Fuente: https://www.evaluandoerp.com/software-erp/sistema-de-gestion/)
Cuando revisamos la definición de Sistemas de Gestión identificamos que es fundamental contar con un equipo de trabajo dispuesto a aportar desde sus competencias técnicas y sus habilidades interpersonales para lograr los objetivos estratégicos de la compañía, ya que “el sistema de gestión, por si solo no es más que una herramienta”; la vida al sistema de gestión la dan las personas que participan día a día en cada una de las actividades.
Por lo anterior y a partir de la experiencia que tenemos con el equipo de Visión & Enfoque, hemos logrado identificar que un factor de éxito para el buen funcionamiento de los sistemas de gestión, es la “Inteligencia Emocional de cada una de las personas del equipo”. La inteligencia emocional sin duda entrega herramientas valiosas para actuar en momentos de crisis en los procesos. Muchas veces las dificultades se incrementan por la forma en la cual asumimos las situaciones, nos tomamos los comentarios de manera personal, olvidando a veces que esto obedece a situaciones del contexto que en ocasiones no podemos controlar y que solo se mitigan o se resuelven cuando cada uno entrega lo mejor que tiene a nivel profesional y con toda la calidad personal para buscar la solución.
Por esto nuestra propuesta para el fortalecimiento de los Sistemas de Gestión es trabajar en la inteligencia emocional de cada una de las personas del equipo; si cada uno se ocupa de gestionar sus reacciones de la mejor manera, sin duda el equipo tendrá menos desgaste y así se podrán resolver de manera más eficiente las diferencias… entiendo que dichas diferencias son las que enriquecen los equipos.
“Imagino un futuro en el que la educación incluirá como rutina el inculcar aptitudes esencialmente humanas como la conciencia de la propia persona, el autodominio y la empatía, y el arte de escuchar , resolver conflictos y cooperar” (Daniel Goleman, La inteligencia emocional).
Nuestra invitación es que no sea el futuro, “hagámoslo ya, en nuestros círculos de influencia, empecemos la siembra para que pronto llegue la cosecha”.