El Descubrimiento Permanente del Talento
Basado en un artículo de Vanesa Rodríguez (Revista New Business)
El pasado 12 de octubre se celebraron 527 años desde que Colón llegó a América. Descubrió nuevas tierras, una nueva raza, nuevos productos, nuevas oportunidades de negocio, marcó el fin de un modo de vida y el inicio de otros. Se sentaron las bases para ser lo que somos hoy como país y como continente.
Descubrir es un reto que vivimos a diario en las empresas, todo evoluciona demasiado rápido, todo pierde vigencia en un instante, hay que marchar a ese ritmo acelerado si queremos trascender con nuestra organización y, para esto, es necesario enfocarnos en el talento y el liderazgo, porque es lo que descubre cada ser humano de nuestra organización lo que nos permite evolucionar y trascender.
Liderar es algo más que ser un buen ejecutivo, es movilizar el talento y facilitar el entorno para que éste se desarrolle.
Descubrir el talento hace que las personas consigan su felicidad profesional, la cual alcanzan cuando disfrutan de lo que están haciendo. Pero para ello necesitan liderazgo, un líder que asuma su rol y provoque que su equipo crea y confíe en él.
“cumplir sólo con las funciones del trabajo, con el tiempo no es suficiente para que aflore el talento. El Liderazgo es un ejercicio permanente de desestabilización de la rutina y solo la innovación nos permite ese ejercicio.
Tener un sueño, una visión, generar entusiasmo, generar adeptos y seguidores, hay que ganárselo día a día con nuestra actitud, comportamiento y aptitudes”.
Así, el liderazgo es clave en el descubrimiento del talento dentro de un equipo de trabajo o en una organización, y el descubrimiento del talento es clave para generar nuevas oportunidades. Por esto el líder, para hacerlo, tiene que ser capaz de liderar su propia vida, necesita tener un sueño que le movilice internamente.
Los líderes son individuos que ejercen una gran influencia sobre la vida de otras
personas. Todos ellos tienen en común un sueño que quieren hacer realidad, que inspira y moviliza a otras personas para que les sigan, pues anhelan su causa y se unen a ella para contribuir a conseguirlo. Trasladado al mundo empresarial, liderar es algo más que ser un excelente ejecutivo con experiencia y formación en la dirección y gestión de equipos. Es descubrir y potenciar el talento dentro de su equipo, ya que está en juego la vida profesional de las personas a las que dirige, y eso es lo que da sentido a la profesión de directivo. Liderar es provocar que las personas quieran estar ahí, siguiendo al líder y poniendo su talento al servicio del equipo, de la empresa. “Esto contribuye a que el objetivo común, la consecución de los resultados deseados, se pueda lograr con mayores garantías”.