Relacionándonos Desde El Servicio
A propósito del día del Amor y la Amistad, que celebramos esta semana, en nuestro artículo anterior, les invitamos a que día a día vivamos una relación profunda con quienes forman parte de nuestra organización: con quienes laboran en ella día a día, con nuestros proveedores, con nuestros clientes o posibles clientes y también con aquellos que indirectamente se benefician de la organización. Cuando hablamos de relaciones profundas, no podemos dejar de referirnos al servicio y todo lo que esta palabra encierra, porque es nuestro don de servir lo que fortalece los vínculos.
Iván Mazo Mejía, en su libro “El precioso Don del Servicio”, nos habla sobre la vida de 6 grandes servidores, entre ellos menciona a La Madre Teresa de Calcuta. Es increíble que una mujer tan humilde, haya logrado dejar tanta huella, llegar a tantos corazones, beneficiar a tantas personas y conseguir tanto dinero para sus obras, todo gracias a su natural y maravilloso Don de servir al otro. La Madre Teresa, era una servidora incansable, si tomamos su ejemplo lograremos valiosas relaciones y grandes beneficios. Iván nos exhorta para ser subversivos del servicio y dice textualmente:
“Para nunca desalentarse en la prestación de un servicio, tenga siempre presente que la subversión del servicio es un acuerdo responsable que usted hace con la vida y no con alguien, es por eso que servir no depende de las respuestas destempladas o gloriosas que uno recibe, cuando usted logre tener esto claro, servir será como respirar, como abrir los ojos, como dar un paso más.”
Se ha preguntado: ¿Cómo presta usted el servicio en su organización? ¿El servicio en su organización es el que usted quisiera recibir? ¿Desde dónde nace ese servicio: Desde el deseo de recibir retribución o desde el deseo de contribuir? Increíblemente, mientras más sea el sentido de contribución, mayor será la retribución y mejor será percibida porque será una retribución no esperada.