NAVIDAD MOMENTO PARA CRECER.
“Navidad, celebración del Nacimiento de Jesús, momento de reflexión.
Hemos tenido un año diferente, un año que nos ha permitido hacer reflexiones profundas sobre nuestro propósito de vida, sobre la forma en la cual estamos dejando huella a través del contacto que tenemos con quienes nos rodean.
Durante la Navidad tenemos la posibilidad de recordar palabras que aunque conocemos desde niños, en ocasiones olvidamos por la prisa que llevan nuestros días, lo más valioso es que son palabras que nos recuerdan el verdadero significado de la “Navidad”, porque la Navidad se vive desde el corazón de cada uno.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay Fe”, la fe nos ayuda a fortalecernos espiritualmente para sortear las situaciones difíciles que se presentan en nuestra vida. La Fe nos invita a ser coherentes, entre lo que profesamos y lo que hacemos.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay Servicio y Solidaridad”, cuando dejamos el egoísmo y el individualismo a un lado, cuando entregamos lo mejor de nosotros para construir un mundo mejor.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay Conversión”, porque es en este momento cuando reconocemos que podemos ser diferentes, que podemos cambiar, que con humildad podemos acercarnos a una vida más serena y mejor.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay Tolerancia”, cuando respetamos la diferencia, cuando no juzgamos y entendemos que llegaremos lejos en la medida que hagamos equipo.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay Justicia”, cuando entendemos que debemos relacionarnos de manera adecuada, respetuosa y buscando siempre el beneficio de todos.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay momentos para el fortalecimiento espiritual”, como una dimensión fundamental del ser humano, a través de la cual se logran reflexiones profundas sobre la trascendencia y se definen acciones para ser mejor persona.
Es “Navidad, cuando en nuestra vida hay AMOR”, el amor que nace en el corazón de cada uno cuando decide llenar su vida de sentimientos que lo hagan ser mejor persona, el amor que crece cuando nos retamos en lo personal y en lo profesional para ser nuestra mejor versión.
Invitamos a pasar una hermosa Navidad, en familia, cuidándonos mucho, agradeciendo todo lo que tenemos hoy y dejando en el pesebre los sueños, los anhelos, las preocupaciones y todo lo que hace pesada nuestra vida.