El final de la cuarentena en Antioquia, nos deja un sinfín de aprendizajes

Hoy 31 de agosto, finaliza la cuarentena por la vida que inició, en Medellín, el pasado 21 de marzo de 2020. En otros departamentos comenzó en diferentes momentos y el martes 24 de marzo, a la media noche, inició en todo el país.

Han sido momentos de gran incertidumbre, donde muchos pensamos que el tiempo sería corto, pero jamás imaginamos que tal cuarentena, no duraría los 40 días que indica su nombre, sino 160, lo que equivale a 4 cuarentenas continuas.

Cada uno de nosotros asumió esta etapa de una manera diferente y, para cada uno, la experiencia fue distinta.

Han sido meses donde los hábitos del hogar cambiaron. Las rutinas se rediseñaron y pudimos compartir en familia, conocernos más y redistribuir responsabilidades que, tal vez, en algún momento ni siquiera considerábamos. La contingencia y, asociado a ella, todo el tema de desinfección, también nos condujo a ser más organizados, a dar más relevancia al aseo y a hacernos más conscientes de lo que puede haber en nuestro aire.

Hemos incorporado nuevos hábitos para el cuidado integral que antes no teníamos porque el afán de cada día no permitía ver sus beneficios, tales como: el ejercicio físico, la lectura, compartir lo leído en familia, ver películas juntos, reunirnos en la mesa para disfrutar las tres comidas principales. Pudimos identificar habilidades que no conocíamos en nuestra pareja, nuestros hijos y en nosotros mismos. Aprendimos a valorar la cercanía de nuestros seres queridos y empezamos a ver detalles que antes pasaban desapercibidos.

Quisimos indagar con algunos miembros de nuestro equipo acerca de lo que ha dejado en su vida las medidas tomadas por la aparición del COVID-19.

Estas fueron algunas de sus apreciaciones:

“Si bien readaptarnos a nuestra nueva realidad no fue sencillo, mi familia y yo hoy estamos agradecidos porque la flexibilidad del horario académico y el tiempo que los niños utilizaban para desplazarse al colegio les permite realizar otras actividades.

Además, aprendimos a trabajar, de manera disciplinada, por nuestros sueños y a valorar los espacios que podemos compartir en actividades diversas y alrededor de la mesa familiar.”

“Durante esta pausa que nos ha regalado la vida he podido reflexionar y valorar pequeñas y cotidianas cosas que tenemos la fortuna de vivir diariamente pero que, por estar en un constante agite, no apreciamos como corresponde.

He comprendido el valor de la familia, los buenos momentos que se comparten alrededor de la mesa, lo rico que es un abrazo y las manifestaciones de cariño.

He entendido que algunos objetos son solo complementos y que lo realmente importante es más simple de lo que creemos.

He aprendido a valorar el empleo y su remuneración por el trabajo bien hecho, la relaciones y los encuentros con el equipo de trabajo.”

“Esta situación tan inusual, me devolvió la calma ante muchas cosas. Sin darme cuenta, le empecé a dar más valor a mi vida. Me di cuenta de lo importante que soy para mi familia y que más allá de eso, nada tiene tanto peso.

Pude notar la cantidad de dinero que gastaba en nimiedades y el que se ahorra al estar en casa. Hice cambios valiosos en función de lo que viviré en adelante. Pude comprender el dolor de otros ante la desestabilización económica y agradecer a Dios por darme el privilegio de tender mi mano para apoyarles.

Perdí a personas cercanas y eso, me llenó de tristeza, llegué a sentir que nada de lo vivido había valido la pena. Comprendí lo mucho que significa el poder acompañar a quienes sienten el dolor de perder a un ser amado. Sentí como mía la soledad al momento del adiós final, porque todas estas personas se fueron sin una mano cariñosa estrechando la suya”

Les Invitamos a seguir en casa, disfrutando de todo lo bueno que hemos encontrado en ella, salir a lo estrictamente necesario, pues la realidad de la pandemia sigue ahí y ahora es nuestra entera responsabilidad el continuar con las medidas de bioseguridad para cuidar nuestra vida y la de los demás.

Comienza septiembre, el mes del Amor y Amistad, es maravilloso iniciarlo, dándonos cuenta de todos estos aprendizajes tan valiosos que, nos han acercado más a lo que amamos.